Salud Municipal y su deterioro

“No acepten lo habitual como cosa natural, pues en tiempo de desorden sangriento, de confusión organizada y arbitrariedad consciente, de humanidad deshumanizada, nada debe parecer imposible de cambiar”.
Bertolt Brech

Salud municipal en crisis

Los hospitales de los municipios de la región están en crisis. Son menos que los provinciales, pero tienen menos recursos y los salarios médicos son muy inferiores a los bonaerenses, lo que provoca un éxodo permanente de profesionales. Paros y problemas de atención marcan el presente.

Los hospitales municipales de la región atraviesan una crisis endémica que parece difícil de revertir para los propios gobiernos municipales que los administran. Paros reiterados, salarios muy inferiores a los de los profesionales que cumplen la misma función en hospitales provinciales y una gran cantidad de médicos contratados que quedan afuera de la carrera hospitalaria por no pertenecer a la planta permanente son algunas de las realidades que los afectan, además de la frecuente escasez de insumos.

Desde los municipios responden que a ellos sólo le corresponde la atención primaria de la salud, y que debiera ser la Provincia la que se haga cargo de los gastos, e incluso proponen una provincialización de los centros asistenciales. Las administraciones comunales coinciden en que es difícil afrontar lo gastos que implica un hospital y además otorgar las mismas recomposiciones salariales que se dan a nivel provincial. Ese retraso en las remuneraciones, entre otras cosas, provoca dificultades para atraer y retener a los médicos.Los críticos sostienen que la situación de los profesionales deteriora la calidad de la atención y se suma a la ausencia de insumos, las demoras de varios meses para conseguir un turno y las malas condiciones edilicias. A partir de estas dificultades, desde los gremios de profesionales aseguran que una buena iniciativa para comenzar a revertir esta situación es provincializar los hospitales comunales ya que sostienen que los municipios no están en condiciones financieras de afrontar los gastos que generan un centro de mediana complejidad. Además, apuntan que esta medida les posibilitaría a las comunas mejorar el estado de las unidades sanitarias ya que la atención primaria de la salud sí es una tarea que recae en los municipios.

Protesta y reclamo.

El 30 de abril, los médicos y profesionales de la salud agrupados en la Cicop realizaron un paro de actividades en los 77 hospitales municipales de la provincia de Buenos Aires. El principal motivo de la protesta fue “luchar contra la persecución gremial y la precarización laboral en los municipios del Conurbano”, y reclamar por la equiparación de los salarios con los que paga el Ministerio de Salud bonaerense.Es que, según el gremio, la situación del personal profesional y no profesional en los hospitales comunales es muy precaria en comparación con sus colegas provinciales.En diálogo con Info Región, el titular de la Cicop, Jorge Yabkowsky, criticó el estado del sistema de salud pública en las comunas porque “allí no hay derechos laborales, hay precarización y bajos salarios, a pesar de que afronta las tres cuartas partes de la atención primaria de la Provincia”. “No se puede atender bien a la gente en estas condiciones”, advirtió.En este sentido, apuntó que “en los municipios no se cumplen las leyes laborales, ni con la carrera sanitaria y sobre todo se persigue a los trabajadores que se organizan como el caso de los dirigentes de Cicop en San Fernando y Pilar, que fueron despedidos”.No obstante, remarcó que la principal falencia es la falta de personal, que atribuyó a que los salarios son más bajos en comparación con los de Provincia. “En Pilar y San Martín están un 40 por ciento por debajo y en Lomas de Zamora un 30 por ciento”, detalló.

Los cuestionamientos de Yabkowsky fueron ratificados por el titular de la Asociación de Profesionales de la Salud del Hospital Alende en Ingeniero Budge, Pablo Torres, que sostuvo que ese centro asistencial “sufre una crisis de financiamiento al igual que todo el sistema de salud del municipio de Lomas de Zamora”.“Eso se traduce en el tema más grave que es la falta de recursos humanos porque el municipio, al pagar sueldos que están muy por debajo de lo que paga la Provincia y el sector privado, no logra retener a su personal”, señaló Torres en declaraciones a este medio.En cuanto a las diferencias salariales entre los hospitales municipales y provinciales, sostuvo que en el Alende les “están adeudando un 3,7 por ciento de un aumento que se dio en la Provincia en marzo del 2007, un 8 por ciento que se otorgó en octubre del año pasado y el 19,8 por ciento que se acordó en marzo de este año”.

En tanto que fuentes hospitalarias indicaron que Lomas “tenía en 1997, 300 profesionales en planta permanente y 200 en planta temporaria y diez años después, a pesar de que el municipio en la gestión de Jorge Rossi ha inaugurado nuevas unidades sanitarias y más servicios en el Alende, hay alrededor de 250 profesionales en planta permanente y cerca de 200 en planta temporaria”.Desde el oficialismo lomense admitieron las dificultades por las que atraviesa el sistema sanitario del distrito. Jorge Ferreyra, presidente del bloque justicialista en el Concejo Deliberante, reconoció que “los sueldos del hospital, al igual que el de los municipales, están atrasados”. “La inflación va comiendo los salarios, pero tenemos que atenernos al presupuesto con el que contamos hoy”, añadió. No obstante, el edil criticó la coparticipación que la Provincia gira al distrito. “Hay ciudades chicas que cobran en proporción más que nosotros. Lomas tiene más de un millón de habitantes y como los censos no reflejan la realidad, en Cuartel IX hay 500 mil personas para un ‘hospitalito’ que no alcanza atender todas las necesidades”, apuntó Ferreyra, quien dio la cara por el oficialismo de Lomas ya que el secretario de Salud del distrito, Roberto Panno, no respondió a la docena de llamados que recibió de parte de Info Región durante cuatro días.Además de la falta de recursos humanos, otros de los problemas graves del sistema de salud pública es la falta de infraestructura que se evidencia, por ejemplo, en las pocas camas de internación que hay en los centros de salud públicos, tanto municipales como provinciales.

Según los datos del Ministerio de Salud bonaerense en los hospitales públicos de la región sólo hay 3.150 camas de internación, lo que es poco para una zona con más de 2 millones de habitantes y en la que alrededor del 50 por ciento no cuenta con cobertura social. El panorama es más delicado si se tiene en cuenta que según las estadísticas del Ministerio, en los hospitales generales, es decir sin contar con los centros especializados, hay sólo 2.100 camas aproximadamente.La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que haya entre 8 y 10 camas cada 1.000 habitantes pero en ningún municipio de la región se da esta proporción: En Avellaneda hay 2,16 camas cada mil habitantes; en Presidente Perón hay 1,54, en San Vicente hay 1,39, en Lanús 1,01; en Almirante Brown 0,75; en Echeverría 0,50 y en Lomas de Zamora 0,37. La provincialización: ¿Una salida? Debido a las graves dificultades que atraviesan los centros de salud comunales, desde los gremios advierten que lo mejor sería que estos hospitales pasen a la órbita provincial ya que implican un gran gasto para los municipios, que en la mayoría de las comunas es muy difícil de afrontar.“La Provincia está girando alrededor de 1.000 millones de pesos anuales de coparticipación específica para Salud a los municipios y el problema es que buena parte de ese dinero entra a rentas generales y se usa para cualquier cosa”, acusó Yabkowsky.

Sin embargo, el titular de la Cicop admitió que en los municipios del Conurbano, los centros de salud “cubren una buena parte del Presupuesto”, por lo que indicó que los Ministerios de Salud y Economía “deberían evaluar la situación y absorber hospitales” como ya ocurrió en el Hospital Horacio Cestino de Ensenada, durante la gestión de Carlos Ruckauf en el 2000, y en el Hospital General de Agudos Mi Pueblo de Florencio Varela en la administración de Felipe Solá en el 2004. “Si esta política es la correcta, hay que hacerlo. No estamos en contra de esta absorción”, apuntó.Esta alternativa fue respaldada por Torres ya que aseveró: “La provincialización sería comenzar a recorrer un camino inverso al que recorrimos durante la década pasada y que terminó en esto. Además este cambio permitiría que los municipios se volcaran de lleno a la atención primaria que es la función que deberían cumplir”, manifestó.La provincialización del Hospital Alende de Budge también llegó a la Legislatura bonaerense a través de un proyecto del Frente para la Victoria.En los fundamentos, la iniciativa precisa que el Alende “en la actualidad cuenta con 76 camas, realiza 3.124 egresos anuales y 1.176.483 consultas, con un personal que no llega a cubrir el 70 por ciento de los cargos”. Además, apuntó que “en el 2007, el Ministerio de Salud provincial le dio al Municipio de Lomas, cerca de 21 millones de pesos por coparticipación para invertir en salud, de lo cual la Municipalidad destinó 7.496.474 para el Hospital Alende”.

Por su parte, Ferreyra reconoció que desde la asunción del intendente Rossi “se ha pensado varias veces” en pedir la provincialización del Alende. “En Salud Pública, desde el municipio tendríamos que atender la atención primaria en las distintas salas para que estén bien organizadas y con guardias permanentes. El hospital lo tendría que tener la provincia de Buenos Aires”, enfatizó. “Esta posibilidad se planteó internamente, en especial cuando surgen estos problemas como la falta de médicos. Con el presupuesto que tenemos se pueden pagar los sueldos del municipio y apenas queda un poco para el Hospital y Acción Social. Hay áreas como Obras Públicas para las que queda muy poco a pesar de todas las cosas que hay que hacer en ese sector”, explicó.Sin embargo, remarcó que en el sistema sanitario bonaerense “también hay deficiencias” debido a que “a la Provincia le pasa lo mismo que a los municipios, ya que la coparticipación que le gira la Nación no es la que debería ser”.En tanto que en Echeverría se mostraron más cautos al ser consultado sobre una posible provincialización del Hospital Santamarina de Monte Grande. “Primero habría que ver si Provincia se quiere hacer cargo. Es una decisión que siempre va a traer riesgos porque el costo de mantenimiento es muy grande”, advirtió el concejal del Frente para la Victoria, Daniel Saavedra.

Pero no todos coinciden en que la provincialización es la mejor alternativa para mejorar el sistema de salud pública. “Provincializar no es la solución porque los hospitales de Provincia, en cuanto a los insumos, no están mejor. Esa no es la cuestión”, recalcó la doctora Julia Cresta, titular de la Asociación de Profesionales de la Salud del Hospital Santamarina de Monte Grande, cuyo funcionamiento depende del municipio de Esteban Echeverría.“Es muy simplista decir ‘provincialicemos y vamos a estar mejor’. La salud en la Argentina está en crisis y en la Provincia también”, insistió la gremialista .

Esta postura fue respaldada por el defensor del pueblo de Avellaneda, Sebastián Vinagre, que luego de hacer un relevamiento por los hospitales provinciales del distrito (el Presidente Perón y el Pedro Fiorito), se mostró muy preocupado por el estado del sistema de salud.“El universo de la salud que comprende a los hospitales públicos ha aumentado notoriamente y han disminuidos los recursos de infraestructura. Además falta personal especializado, enfermeras y en algunos casos, profesionales de guardia”, indicó.En este punto, precisó que en el Hospital Fiorito, “la unidad de trauma no funciona y la de neonatología ha tenido muchos inconvenientes por falta de personal de enfermería, por lo que los profesionales a cargo de los servicios tienen que hacer malabares”.

El problema del presupuesto.

De los gastos por 35 mil millones de pesos contemplados en el presupuesto 2008 de la provincia de Buenos Aires, 2.400 millones fueron destinado al sector Salud, un poco más de los 2.038 millones que se destinaron en el 2007.Sin embargo, para la Cicop esto no es suficiente ya que advierten que “con menos de 3.000 millones de pesos anuales, es muy difícil empezar a dar una respuesta desde los sectores públicos a las demandas de la población”. Este reclamo fue respaldado desde los municipios, por ejemplo en Echeverría, ya que según Julia Cresta, “el hospital Santamarina está mal desde hace bastante tiempo y no ha mejorado porque el tema es que no hay un presupuesto adecuado”.“Ahora se va a aprobar el Presupuesto 2008 el cual todavía no lo conocemos en detalle pero es menor que al del año pasado y teniendo en cuenta que la partida anterior en Salud fue totalmente insuficiente, está claro que la situación no va a mejorar. Cuando faltan insumos y recursos humanos es por falta de presupuesto”, indicó.“Necesitamos una constancia en cuanto a los suministros mínimos e indispensables. Eso lo puede garantizar una partida para Salud adecuada y suficiente pero eso depende de la decisión política”, enfatizó.Por otra parte y a pesar de criticar una posible provincialización del Santamarina, Cresta reconoció que un profesional, al momento de optar entre un centro municipal y uno provincial, “obviamente va al de Provincia ya que va a ganar más”. “Por este motivo, hay un éxodo de profesionales en los hospitales que genera guardias vacantes de determinadas especialidades, falta de recursos humanos en la atención primaria y en el segundo nivel.

En la medida que no equiparemos los sueldos a los de Provincia, no se puede retener a los profesionales que tenemos ni traer lo que nos falta”, se lamentó.Sobre esta situación, también se quejó Yabkowsky, quien apuntó que “en el sistema de atención primaria de Salud no hay estímulo porque no hay carrera”. “Hay precarización laboral y no hay ninguna expectativa de progreso. Se trabaja en sectores en donde se está sometido a los designios de los punteros, administradores de los intendentes que pasan por encima de las decisiones profesionales”, acusó.Teniendo en cuenta este contexto, el titular de la Cicop justificó el fenómeno de ausentismo que se da en algunos centros asistenciales y aseveró que esto no ocurriría si hubiera “salarios dignos, carreras sanitarias y unidades bien equipadas”.

En tanto, Vinagre también remarcó que la falta de personal en los centros de salud pública “tiene un correlato directo con los salarios que se pagan en la Salud”. “En Capital Federal o en cualquier sector de la actividad privada están triplicando los salarios de una enfermera de Avellaneda o de la provincia de Buenos Aires. Es un problema provincial y no municipal”, apuntó.No obstante, insistió en que “la estructura hospitalaria ha quedado chica en la Provincia”. “Si bien en Avellaneda contamos con hospitales interzonales tenemos una afluencia importante de gente de todo el conurbano. No hay suficientes camas, ni personal hospitalario y hay servicios de guardia que tienen serias deficiencias”, concluyó.

Asimismo, Ferreyra sostuvo que para el municipio de Lomas de Zamora “es imposible pagar guardias de 400 pesos como en el sector privado para cubrir todas las salas y el hospital con el actual presupuesto”.“Un pequeño aumento para toda la planta de trabajadores, que son 5.000, representaría cerca de 9 millones de pesos al Municipio anuales y no está en condiciones de afrontar ese gasto. La comuna está saneada y regularizada pero paga 10 millones de deudas anteriores todos los años”, apuntó.Una vez más, en teoría, es sistema de salud provincial es razonable. Los municipios se encargan de la atención primaria, y la Provincia asume la responsabilidad de financiar los centros de mediana y alta complejidad. Sin embargo, las necesidades de los habitantes del conurbano fue obligando a los municipios a asumir una responsabilidad que supuestamente no les corresponde, y que claramente no están en condiciones de financiar.

Fuente: Inforegion.com