De Angeli, ese ¡¡gran argentino!!

“No acepten lo habitual como cosa natural, pues en tiempo de desorden sangriento, de confusión organizada y arbitrariedad consciente, de humanidad deshumanizada, nada debe parecer imposible de cambiar”.
Bertolt Brech

De Ángeli fue el líder en Rosario

QUERIBLE. El tema musical en su honor dio pie a la presentación de quienes se dirigirían a la multitud. El entrerriano volvió a ser ovacionado. (NA)
Fue el primero en hablar y le marcó el tono al multitudinario acto en Rosario. El entrerriano fue quien puso plazos al Gobierno nacional: “Si mañana (por hoy) no hay solución, el martes empiezan las acciones”. Como si fuera un artista en escena, volvió a tomar el micrófono, al final, a pedido de la concurrencia.

Tal como estaba previsto, los únicos oradores en Rosario fueron los titulares de las cuatro entidades del agro que sostienen el reclamo en contra de las retenciones móviles. Pero para los productores de todo el país que lo aclaman, fue importante sumar la figura del entrerriano Alfredo De Ángeli para “animar” la masiva concurrencia de Rosario.El dirigente local de Federación Agraria –que aprendió en estos meses cómo cautivar multitudes y aprovechar cada minuto de televisión en vivo-, abrió el acto con su estilo campechano y también con la dureza con la que se lo identifica en el marco de las negociaciones con el Gobierno nacional. Con una virgen en el atril, De Ángeli marcó desde un primer momento el tono que tendría el acto. Le puso plazos a la negociación con el Gobierno dificultando un paso atrás en los oradores que le siguieron en el uso de la palabra Fernando Gioino (Coninagro); Luciano Miguens (Sociedad Rural Argentina); Mario Llambías (CRA); y Eduardo Buzzi (Federación Agraria). Concretamente, De Ángeli advirtió: “Si mañana no hay solución, el martes empiezan las acciones”. FIRMEZA. En primer lugar, De Ángeli también marcó las lecturas respecto de la concurrencia al acto. Estimó que la protesta convocó a 300 mil personas, 100 mil más que las proyecciones más optimistas que se habían hecho.Luego, sin más dilaciones, el entrerriano pasó a las advertencias: “El campo se está rebelando, y hasta que no se solucione el problema la lucha sigue y no vamos a aflojar”.“El Gobierno nacional quiere que lleguemos a un caos. Si nos quiere hacer enfrentar a la sociedad, no lo vamos a hacer. Si no hay solución, el martes empiezan las acciones”, insistió el dirigente, que subrayó: “Mañana (por hoy) hay una reunión muy importante. Espero que el Gobierno tenga la solución”, alertó De Ángeli.Sin embargo, en otro tramo del discurso, pareció dar por cerradas las posibilidades de encontrar una salida al conflicto: “La solución no está mañana. Hay mucho para lograr. Cuando la señora Presidenta dice que distribuye la riqueza, lo hace para los grupos concentrados”, consideró el entrerriano.

MODALIDAD. A propósito, amplió: “El martes al mediodía vamos a tener que ponernos en asamblea, pero con inteligencia”. “Les pido inteligencia. Les pido que pensemos cada paso que demos –advirtió-. El Gobierno quiere que lleguemos al punto de cortar rutas para enfrentarnos con la sociedad. Si cortamos rutas va a ser por culpa del Gobierno”, responsabilizó de antemano.“Espero que mañana (por hoy) tengamos una solución y que no sea otra mala jugada para que terminemos cortando las rutas y nos hagan responsables porque no saben cómo llevar el país adelante”, disparó y acotó: “Si hay soluciones, el martes nos ponemos a sembrar trigo, producir leche y carne, pero si mañana no hay solución, empiezan las acciones”.El dirigente de la Federación Agraria de Gualeguaychú dijo que se tomó “el atrevimiento de invitar a la señora Presidenta a presidir este acto, pero con el acuerdo firmado, junto a nuestros gobernadores. Pero nos falló”, se quejó el dirigente. “Queremos tener un país de agroexportadoras, no de pobres”, enfatizó hacia el final.Luego de los discursos previstos, y tras la aclamación de la concurrencia –“Alfredo, Alfredo”- De Angeli volvió al palco como una estrella de rock que concede un bis. Fue para reiterar sus advertencia: “Si esto no se resuelve vamos a seguir firnes, no vamos a aflojar. ¡La lucha sigue!, ¡La lucha sigue! No vamos a aflojar”.Una demanda para no desoír.

“EL ACTO DEL CAMPO ECHÓ POR TIERRA . Los presagios del discurso oficial”, subrayó la diputada de la Concertación Entrerriana, Ana D’Angelo, luego de finalizado el encuentro multitudinario, ayer en Rosario. Se refirió de este modo a que el acto “ni antes ni durante” fue “de la oposición política”. “Los dirigentes de distintos partidos y sectores gremiales se ubicaron en un absoluto segundo plano y fueron los productores rurales los verdaderos protagonistas”, marcó la legisladora. “El pluralismo de los mensajes y la diversidad de participantes demostró que la demanda supera ampliamente el reclamo por una reivindicación sectorial”, enfatizó D’Angelo, que rescató la realización de “una movilización espontánea y una concentración multitudinaria” que se lograría “sólo por la legitimidad y justicia del reclamo y porque la única bandera empuñada fue la argentina”. “Las retensiones fueron sólo el disparador de un debate mucho más profundo y postergado”, repasó y, en este sentido, enumeró: “La pérdida del federalismo, la progresiva concentración de tierra, la siempre postergada distribución de riqueza, la definición del proyecto productivo, la pobreza y desaparición de los pueblos del interior”.

Refranero para el público, el entrerriano que ganó fama nacional, Alfredo De Ángeli, volvió a demostrar su capacidad para despertar en el auditorio una empatía llamativa. “Nos quieren hacer cartera como al yacaré”, graficó.

Hizo un resumen de los principales reproches que se le dirigen hoy al Gobierno. No sólo se refirió a la llamativa mala praxis con que se trata al sector agropecuario –“el 25 de Mayo era el día en que comenzábamos la siembra del trigo y hoy ni engrasamos las sembradoras”—sino que enumeró otros tópicos corrientes: desde el “tren bala” (“el negocio está en el proyecto”, dijo) hasta la discusión sobre los niveles de pobreza (“están aumentando la pobreza para que los vayan a aplaudir a los actos”, criticó).

De Ángeli inauguró también uno de los motivos recurrentes de la jornada: el castigo a los gobernadores que se inclinan ante el centralismo fiscal que impone la Casa Rosada, olvidando los reclamos de sus comunidades rurales –“A ellos les van a preguntar ‘¿papá, abuelo, en el 2008, de qué lado estabas vos, del lado de la provincia que te votó o del lado del Gobierno nacional?´”, repasó La Nación.

De Ángeli demostró que, más allá de sus condiciones de comunicador, cuenta con la astucia del dirigente. Pidió que los productores no vuelvan a las rutas de inmediato pero no en homenaje al Gobierno sino “a los hermanos del Norte, que me pedían recién, Alfredo, dejános llegar al martes para volver a nuestros pueblos a acomodar el recado”.De Ángeli expuso, a propósito, la visión que domina a muchos líderes rurales: “Quieren que volvamos a las rutas y al piquete, adonde iremos si es necesario, para hacernos culpables de la inflación y del desastre”.